Clima??

Ya casi llegando la medianoche, todo se encuentra en silencio en este sector de la ciudad. No hay ningún ruido de motores acelerando o personas conversando. Sencillamente hay paz y tranquilidad. Al correr las cortinas color carmesí se aprecia por la ventana una densa capa de niebla abrazando a la tierra, tan densa que parece una gran pelusa blanca.

El sonido ecuestre de la lluvia en los techos metálicos de cada hogar, formando una sinfonía casi perfecta, tan ordenado como el galope de un grupo de caballos de raza, tan fuerte como una estampida africana pero a su vez tan serena como simples gotas de lluvia. La calma ha llegado a la ciudad, y son estos momentos de silencio los que le traen paz a mi alma. Donde mi mente no es invadida por pensamientos traicioneros de economía, política, religión o cualquier otro tópico mundano que la gente utiliza. Mi mente sencillamente puede pensar en lo que ella quiera, dándole rienda suelta a mi imaginación y sin importarle cual persona se ponga enfrente.

Conforme pasan los años, los habitantes de esta tierra están tan ocupados con sus vidas que se olvidan de detenerse y admirar el paisaje, admirar lo que le estamos arruinando a las futuras generaciones. La gente se preocupa mucho por todo lo que sucede a su alrededor pero no se da cuenta que muchas veces la solución está en el aire. Literalmente, el aire. Con solo una bocanada de aire fresco, un vistazo al cielo y la percepción del verdadero sonido del mundo, muchos problemas simplemente se desvanecen.

Tal vez esa sea la razón que en zonas rurales no hay psiquiatras, ni loqueros, y los más grandes problemas sean que se quemo la comida. La vida es muy linda como para desperdiciarlas en mierdas de este tipo. Así que la próxima vez que llueva, únete a nosotros y detente un momento, siente cada gota estrellándose contra tu rostro, vive el viento bailando libremente. Vive el momento mientras dura.
Carpe Diem

R.A.Pastor