7 de julio de 2010

Avanzando en Reversa

Entre mi memoria se encuentra un recuerdo de un paseo que realizo el colegio donde yo asistia, fuimos a algun lugar en Cartago, el bus nos dejo en la base de una colina y el director del lugar donde nos ibamos a quedar nos dijo que debiamos subir la colina de mas de un kilometro de largo y que contenia alrededor de veinte curvas. Claro esta que para todos mis companeros, incluyendome a mi, teniamos una pesima condicion fisica y subir un kilometro fue sencillamente mortificante. A mitad del trayecto, todos los musculos de mi muslo y pierna me estaban torturando pero algo interesante me sucedio, alguien que iba detras mio me llamo y mientras me volvia segui caminando, talvez por la misma inercia segui subiendo por ese camino y mientras lo hacia me percate que mis musculos me dolian menos al hacer ese movimiento, la razon realmente en estos momentos no me interesa en lo mas minimo, lo unico que me acuerdo es pensar avanzar en reversa duele menos. Es increible como no me acuerdo del campamento ni de las actividades, pero lo que resalta a mi mente es aquel pensamiento en aquel momento determinado. Conforme el tiempo transcurrió otras ideas fueron poblando mi cabeza y sencillamente la frase se perdio dentro del basto pueblo de mi mente, se volvio tan relevante como hierba de pradera. Pero recientemente ha estado tomando fuerza, como si alguien le hubiera dado su porcion de espinacas. Avanzar en reversa. Ultimamente es lo unico que he estado haciendo, poco a poco estoy caminando en reversa; estoy volviendo a aquellos lugares donde todo comenzó para poder apreciar bien con mis cinco sentidos que fue mi gran error. En vez de poner mis ojos hacia mi futuro, me he preocupado mucho por mi pasado, por mis errores, mis pecados mortales. Por mas que lo desee una segunda oportunidad para poder arreglar mis faltas o por lo menos hacer que sean menos dolorosas no solo para mi sino para las personas que me rodean, por mas que lo desee mi corazon sabe que no se puede hacer nada al respecto. Somos el producto de nuestro pasado, el conjunto de experiencias que terminan formando nuestra forma de ser. Creciendo de mis propias erratas, tratando de forjar un mejor camino; pero mas importante que todo, para no llegar exhausto a la meta. Lo menos que quiero es mi alma abandonada a un lado de la carretera sin fuerzas a causa de un dolor insoportable. Aun no se cual sera mi limite o si estare cerca de alcanzarlo. Son pocos los idiotas que gastan sus fuerzas en mirar hacia atras, revivir toda la tortura que han pasado, abrir esas heridas solo por el hecho de querer aprender. Yo soy uno de esos pocos idiotas, necesito saber que hice mal para poder arreglarlo, o por lo menos evitarlo en un futuro no muy lejano. La vida es muy corta y ya he cometido suficientes errores, he lastimado a mucha gente, he perdido mis batallas y hasta una que otra guerra contra mi mismo. Mi cuerpo esta cansado, y mi alma abatida, pero por inercia sigo caminando, sin siquiera saber a donde me dirijo, dejo que el viento guíe mis pasos. Estoy avanzando en reversa, no se a donde voy solo de donde vengo y una cosa tengo por asegurado, a donde voy no puede ser peor que de donde vengo.

R.A.Pastor

No hay comentarios:

Publicar un comentario