9 de julio de 2010

El Gran Monstruo Verde

Cuantas veces nos aferramos a nuestro orgullo y este nos cierra tantas oportunidades en la vida de crecer y realmente llegar a ser alguien, cuantas veces por un simple capricho de nuestro corazon nos guardamos una palabra, privamos un sentimiento por la sencilla razon de que una parte de nosotros tan solo no quiere hacerlo, ya sea por auto-proteccion, por miedo, odio, confusion o cualquier otro sentimiento que realmente no lo vale, eligan ustedes su veneno, su razon del porque le quitan ese sabor peculiar a la vida. Muchas veces el orgullo, aquel monstruo verde que habita en lo mas profundo de nuestros corazones, me ha impedido de realizar muchas acciones, al cierto punto de que he perdido amistades por terquedad a no admitir que realmente yo tengo la culpa de lo que ha pasado. He perdido muchas personas importantes en mi vida por tantas idioteces que he hecho, pero el orgullo me ha impedido el poder recuperarlas, el orgullo ha convertido personas en recuerdos, en espejismos formados por densos rayos de luz que difuminan mis sentidos. Por lo menos en mi caso, se ha manifestado de diferentes maneras, desde grilletes que me han impedido abrazar a una persona cuando mas lo necesita, dar una mano amiga a quien lo ocupa o simplemente extender mi mano hacia mis enemigos para reconocer que he sido derrotado o que se ha ganado mi respeto; hasta vendas que me han impedido de ver lo que realmente esta sucediendo. Desde pequeño he aprendido conductas de mi familia y muchas de ellas estan fuertemente ligadas al orgullo, ergo, yo tambien he aplicado orgullo no solo en mi conducta sino tambien en mi forma de ser, y muchas veces se ha apoderado de mi porque no he sido lo suficientemente fuerte para contrarestarlo. El orgullo es un ogro viviendo a las afueras del castillo, la mayoria de las veces este vive en relativa paz con los habitantes del castillo, mientras nadie perturbe al ogro o mientras este no tenga hambre, no representara un peligro a la sociedad. Pero nunca falta aquella persona que decida dirijirse hacia los rumbos donde el ogro vive, ojala llegue a molestar el delicado balance que existe en el aire. Lo peor que pueda pasar es que el ogre llegue a tener un ataque de ira descontrolada y no solo termine despellejando a la persona sino devorandosela completa. Tambien hay que recordar que el orgullo como cualquier otro mal que corroe nuestras almas necesita ser alimentado, muchas veces se nos olvida que no hay que alimentarlo despues de medianoche o darle mas de lo que necesita comer sino se volvera un peligro dentro de nosotros. Al mismo modo el ogro sin comer lo suficiente tiene la urgencia de entrar al castillo y devorar lo que haya dentro, de la misma manera pasa en nuestra mente, al final camina sin control engullendo todo por su camino. Al final de esta triste historia de masacres y ogros aparece un heroe con su espada y logra decapitar al ogro para asi mantener la paz en el castillo. Sera que el final de esta metafora podra parecerse a nuestras vidas? O sencillamente aun no dejamos que nuestro caballero combata? Algun dia tendremos que ser parte de la historia y vencer todos los monstruos que nos atemorizan.
Para finalizar, sabiendo que es poco probable que sepan, quiero colocar mi orgullo a un lado y pedirle perdon a todas aquellas personas que he lastimado en el transcurso de mi caminar. Muchas veces ha sido mi culpa y muchas veces no, pero sin importar quien lastimo y quien salio lastimado quiero disculparme por no ser esa persona que quiero ser. Del fondo de mi corazon, Perdon.

R.A.Pastor

No hay comentarios:

Publicar un comentario