26 de agosto de 2010

Caricias de animas perdidas

Mi piel se eriza con el simple pensamiento. Mas que pensamiento se convierte en un recuerdo, recuerdo de todas aquellos tiempos en que solo eramos tu y yo. Tus gotas de sudor mezcladas con las mias. Atardeceres que se gastaron en nuestros ojos y noches que nos arroparon. Las veces que mis dedos se encontraron con los tuyos entrelazandose y creando un vinculo perenne. Tu piel junto a la mia, escuchando tus latidos haciendo dueto junto a las mias. Aquellos labios que una vez besaron los mios y la silueta de nuestros cuellos formando un corazon en la pared. La piel se eriza y el corazon sangra. Creando un requiem para poder olvidarte. Dulce sinfonia del organo que despide tu feretro. He ahi un hombre de traje negro y corbata roja, con su cabeza baja y lagrimas brotando de sus ojos. Tan solo mirandose sus manos, unas manos llenas de sangre y penurias. Ese hombre soy yo. Asesino de suenos y esperanzas juntos. Soy el director de obras funebres, el creador de esta obra de arte. Yo cave la tumba y escribi el epitafio. Aqui yace aquella persona que una vez ame. Desde aquel dia no solo te convertiste en fertilizante para las rosas negras, sino en el espectro que ahora me persigue. Un anima que ahora se pasea por el cuarto, que pasa por el mismo lugar donde una vez estuviste. La atmosfera que me rodea se torna fria y subita. El roce que una vez hizo mi corazon acelerarse, ahora hace que me despierte sudando frio. Mi corazon se encargo de quitarte la vida y enterrarte en una prision marron. Confuso y desorientado este ya no sabe que senal emitir. Mi cerebro te siente junto a mi. Cada dermatoma se activa con tu roce pero enganan a mis ojos. Ya no estas aqui, aun me pregunto por que no estas aqui. Talvez, y solo talvez, si Lazaro fue capaz de resucitar, tambien haya una posibilidad de que tu tambien lo hagas.

R.A.Pastor

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